Apuntes sobre IMPROVISACIÓN
Hay un instante, donde el juego y la consciencia observadora se unen. Y a la vez se sueltan. Ese momento, de enorme gozo, puede dar a un instrumentista improvisador el placer de deslizarse por una narración sonora espontánea, con una certeza técnica y emocional de dimensiones tal vez extrasensoriales.
La sensación de no habitualidad, seguramente, se deba a la relajación extrema del juego, que a la vez se manifiesta con un alto nivel de conciencia. Además, se da cierta forma intensa de composición en tiempo real donde, estemos trabajando solos o en grupo, sabemos lo que hay que hacer. Transitamos formas o intenciones, que parecieran provenir de una matriz que se nos presenta muy precisa y contundente.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario